El presidente, Andrés Manuel López Obrador, declaró que no apoyaría la postulación de algún militar al gobierno.
«Yo no creo que debe de debe de haber autoridad militar», sostuvo. Incluso, acotó, «ellos no piensan en eso».
«No, yo soy juarista», dijo, refiriéndose a que sigue las ideologías políticas de Benito Juárez, que separó a los poderes civiles de los militares.
«A Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César. Y Juárez era civilista y su civilismo no sólo era teórico, él vivió lo abusos del autoritarismo militar, a él le tocó enfrentar a Santa Anna», expresó.
Recordó que, durante los mandatos de Antonio López de Santa Anna y Porfirio Díaz, quienes gobernaban en los estados eran militares.
«Juárez les ordena a los militares que gobernaban los estados, que entregaran el mando de nuevo a los civiles», enfatizó.
Por otro lado, subrayó que las actuales Fuerzas Armadas son «profesionales, disciplinadas, leales, que surgen de un movimiento revolucionario y que pertenecen al pueblo, no a la oligarquía», dijo.
«Este es un Ejército leal al gobierno civil, legal, democráticamente constituido, y yo tengo mucho que agradecerles a los Marinos y al Ejército», manifestó.
Añadió que los militares tienen, por obligación Constitucional, contribuir al desarrollo del país y proteger a la población en casos de desastre.