En el fenómeno social de migración, que mantiene un crecimiento constante desde el 2019, México se colocó como el tercer país a nivel mundial con más solicitudes de refugio, de acuerdo con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados.
Por ejemplo, en 2021 se alcanzó una marca histórica con 130 mil peticiones de 110 países, ubicándose en el tercer lugar, después de Estados Unidos y Alemania. Por su parte, Tapachula, Chiapas, es el sitio donde se realizan hasta 65% de las solicitudes de refugio a México.
El crecimiento es exponencial. Es decir, en el 2013 hubo mil 296 solicitantes; en 2018 29 mil 700 solicitantes, pero en el 2019 se dispararon a 70 mil solicitudes.
Por otro lado, del total, 23% correspondió a niñas, niños y adolescentes; si se incluye a los jóvenes de hasta 24 años, alcanza 50%. “Es una niñez y juventud refugiada. Nos da la posibilidad de entender que es un fenómeno que tiene un peso específico de gran magnitud”, comentó Andrés Ramírez Silva, coordinador de la Comisión.
Durante un seminario en la UNAM, el economista resaltó que el flujo en estos últimos años continúa siendo un desafío por la capacidad operativa limitada.
Detalló que, en 2023, se triplicó el promedio para el mes de enero. “Tuvimos 12 mil 863 solicitantes, otra marca histórica”. Agregó que varios de ellos menores y adolescentes acompañados; y solo el 1% de no acompañados.
Además, subrayó que, por primera vez, Afganistán formó parte de las primeras diez nacionalidades que más solicitaron refugio durante enero (séptimo). “Esto no tiene comparación en nuestra historia, porque es una cultura distinta, con alimentación, religión e idioma diferentes. La mayoría habla darí, idioma similar al persa, sabemos que huyen porque el talibán regresó al poder en agosto de 2021”, precisó.
Lo mismo ocurre con los haitianos, acotó, quienes no hablan español, portugués o francés, sino creole, lo que dificulta la comunicación.