El Papa Francisco dio a conocer que, prácticamente cuando inició su Pontificado, firmó una carta de renuncia anticipada que se daría bajo una condición, lo que hace pensar en si ¿habrá Papa para rato?
Fue en 2013 cuando el Papa Francisco llegó al Vaticano, en ese entonces, de 77 años. Hoy, a sus 86 años, tiene algunos problemas de salud que le aquejan.
Uno de ellos, en la rodilla derecha, podría ser la causa principal para que renuncie como Papa. En algunas ocasiones se le ve usando un bastón o trasladándose en silla de ruedas. También, dicha condición le hizo cancelar al menos dos viajes internacionales.
“Yo ya he firmado mi renuncia […] Yo la firmé y dije: En caso de impedimento por cuestiones médicas o qué sé yo, acá está mi renuncia. Ya la tienen”, comentó el Papa argentino en una entrevista.
¿Significa que desde que comenzó su Pontificado ya conocía su estado de salud y se preparó para el día en que ya no pueda seguir? No hay información oficial. Lo que sí, es que, de darse esto, sería la segunda ocasión de manera consecutiva en que un Papa renuncia. El anterior fue Benedicto XVI, su predecesor.
Tampoco se sabe dónde está esa carta. Al respecto, dijo que se la entregó a Tarcisio Bertone, quien en ese entonces era el secretario de Estado. “No sé a quién se la habrá dado el cardenal Bertone, pero se la di cuando era secretario de Estado”, dijo.
Otro de los rumores que harían pensar en una posible renuncia es su edad. Se convirtió en Papa a los 77 años, siendo el séptimo con edad más longeva en ser Pontífice de la Iglesia Católica. De todos ellos, el que más años duró fue Clemente XII, con 9 años, justo los que lleva el Papa Francisco.
Finalmente, el propio representante del catolicismo expresó que “se gobierna con el cerebro, no con las rodillas”, haciendo alusión a su problema de salud. Por lo tanto, al final, la decisión de continuar más tiempo la tomará él.